Espacio: Vamos al Parque. Diario 2001.
por Beatriz Borges
@beabor
En el mes de febrero 2013 hubo un reconocimiento oficial de las cifras de violencia en Venezuela. Para ese entonces, el vicepresidente de la República, Nicolás Maduro, reconoció que el número de homicidios ocurridos en Venezuela durante el año 2012 fue de 16.030. Cuando miramos las estadísticas vemos como la mayoría están compuestas por hombres, sin embargo, cada vez mas empezamos a ver como las mujeres están siento protagonistas de estas cifras de violencia en Venezuela. Este año ha sido un claro reflejo de eso, según cifras extraoficiales ha habido un incremento del doble de asesinatos que durante el mismo lapso en el 2012. El aumento del maltrato y asesinato de mujeres en Venezuela se inscribe dentro de la oleada de violencia en general. Las cifras de muerte de mujeres a manos de la violencia nos muestra el rostro de una lamentable tragedia que comienza a trascender el silencio. Uno de los grandes problemas es que no existen estadísticas de género que evidencie la problemática de violencia contra la mujer, por lo que es muy difícil discriminar cuantos de estos crímenes están circunscritos en situaciones de violencia común delictiva o por razones de género, en todo caso, no existen datos ni medios de monitoreo oficial que sean de acceso público para conocer la situación real de violencia y poder analizar y prevenir sus causas. La información que se conoce es sobre proyecciones basadas en los casos que las organizaciones de mujeres manejan o que aparecen en las noticias que se recogen de los periódicos nacionales y regionales. Se trata de un subregistro que a pesar de ser útil y permitir hacer aproximaciones al problema, no demuestra la realidad. En este contexto la Asamblea Nacional aprobó por unanimidad, en primera discusión, el Proyecto de Reforma Parcial de la Ley Orgánica sobre los Derechos de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. La fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, solicitó la reforma de alguno de los artículos de la ley, donde entre otras cosas se propone la inclusión de sanciones para quien cometa el delito del femicidio. No es el propósito de esta reflexión atacar la reforma propuesta, pero tampoco queremos hacernos eco de una iniciativa que encubra una política insuficiente de Estado que ha generado una situación donde el problema de la violencia contra las mujeres no se ha mejorado sino mas bien sigue empeorando. Las leyes son un primer paso, pero sin la aplicación debida, la creación de políticas públicas adecuadas y la promoción de una cultura de paz la situación seguirá agravándose. La Ley actual esta vigente desde el 2007 y hay todavía un abismo entre lo que establece la ley y la realidad. Desde la Clínica Jurídica de DDHH de la UCAB donde atendemos casos de violencia contra la mujer, vemos día a día como las instituciones no dan respuesta efectiva a esta situación. Por citar algunos ejemplos vemos las dificultades que afrontan en el acceso a la justicia las mujeres que son víctimas de violencia, o como todavía el cumplimiento de las obligaciones de Estado en cuanto a las creación de casas de abrigo o el impulso de las fiscalías especializadas en género, esta muy lejos de ser una realidad pese a lo establecido en la ley vigente. El llamado es al Estado venezolano a asumir medidas concretas para erradicar la violencia contra las mujeres. El próximo año se cumplirá el veinte aniversario de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer (Belém Do Pará), de la cual es parte Venezuela, por lo que esperamos que la forma de celebrarlo vaya mas allá de la reformas legislativas y pueda ser una realidad la erradicación de la violencia contra las mujeres en Venezuela
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