Semanas atrás tuve el placer de participar en algunas conferencias que formaban parte del Congreso Internacional sobre Buenas Prácticas Electorales para el fortalecimiento de la Democracia, organizado por el Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello. A parte de lo importante que considero el organizar este tipo de actividades hoy en día, no solo por la pertinencia del tema dentro de nuestra coyuntura política electoral, sino por el hecho de la necesidad que tiene en nuestra sociedad de debatir con contenido y pensamiento critico e informado de lado y lado un tema tan vital correspondiente a la democracia misma en un país que desde hace tiempo no permite sentarse a hacer este tipo de ejercicio. Por lo que mi primer mensajes es para felicitar a la academia y en especial al la UCAB y al Centro de Estudios Políticos por tan importante iniciativa.
Ya entrando en los contenidos desarrollados por los distintos ponentes. Puedo comentar algunas ideas que me llamaron a atención y que me permiten reflexionar sobre lo que creo que será el futuro electoral de las elecciones municipales del 08 de diciembre.
Tomando en cuenta las distintas presentaciones de estudios cualitativo sobre las condiciones electorales que hicieron expertos en la materia, llama la atención los datos referentes a la percepción del país con respecto a la labor del CNE que, como no es difícil de adivinar, en un porcentaje de casi 60 por ciento, es negativa y con desconfianza.
Podríamos pensar que en esto ha jugado mucho la polarización que vive nuestro país, pero según los análisis, no necesariamente las instituciones deben ser juzgada negativamente por la población. Esto esta pasando en Venezuela, pero por ejemplo, no en países como Chile o en España, donde también existe una gran polarización. Sin embargo, el problema de la visión negativa y la desconfianza hacia el ente electoral radica en la desmovilización para las elecciones y es allí donde esta mi principal reflexión .
Se que son muchos los Venezolanos que hoy en día entienden con claridad que la clave de cambiar nuestra realidad en no perdiendo los espacios y exigiendo y ejerciendo nuestros derechos. Por lo que frente a esto, la estrategia de los que queremos un cambio debe ser votar e impulsar el voto masivo.
Para lograr un cambio la movilización debe seguir siendo la clave. Lo digo con conocimiento de causa, ya que la movilización de los electores es parte fundamental del trabajo político que deben realizar las organizaciones y los candidatos ante este contienda electoral. Frente a eso, esta el reto de motivar a los electores, de darle razones para movilizarse y votar el 8 D y organizarse para lograr que esto sea posible.
Veo este tema con pasión. No solo porque entendemos que decidimos con nuestro voto, sino porque todo el proceso de hacer que la sociedad tome consciencia y actúe en consecuencia votando y activandose es parte de hacer DEMOCRACIA con mayúscula.
Toca votar, pero también toca, informarse de las opciones electorales, organizarse, colaborar, ser voluntario, ser movilizadores, usar las redes sociales, hacer denuncias, observar, participar, y todas aquellas acciones que nos acerque al mas alto deber como ciudadanos activos, estas que serán las que definitivamente definan nuestro "Futuro Electoral".
@beabor
